El análisis de esta red y de sus mensajes ha permitido estudiar sus estrategias comunicativas. He aquí algunas características de su estilo en vísperas de las elecciones presidenciales.
- Lenguaje sencillo. Al leer los mensajes de Trump, salta a la vista lo sencillo de su lenguaje. Un estudio basado en miles de sus tuits concluye que sus mensajes tienen la complejidad del habla de un crío de 10 años. Hay una razón para ello: las palabras simples son eficaces. Por ejemplo, la mayoría de los materiales de marketing están escritos de manera que puedan ser entendidos por niños, indica el mismo estudio.
Si observamos las palabras más comunes en sus mensajes, eliminando preposiciones o pronombres, vemos que la mayoría son breves y claras. El término que más repite es “gran” o “genial” (“great”), seguido de otros como “gracias”, “justo”, “gente”, “nuevo”, “ahora”, “grande” o “fuerte” (casi todos monosílabos en inglés).
- Tono conversacional. Los mensajes de Trump se caracterizan por su tono conversacional, con una tendencia al uso del lenguaje directo.
Esto se puede asociar con la elección de las plataformas como vehículo de comunicación. Trump prescinde de los medios periodísticos tradicionales para acercarse a sus votantes sin mediación aparente. Existe mediación, por supuesto, dado que los algoritmos de las plataformas seleccionan y recomiendan ciertos contenidos por delante de otros, pero este tipo de comunicación ofrece una apariencia de frescura y candor.
- Fomento de la polarización. Gran parte de este lenguaje simple se puede observar en su elección de adjetivos. Si se enumeran los calificativos comunes en sus mensajes, vemos una cuidadosa distribución de opuestos: “bueno” y “malo”, “mejor” y “peor”, “nuevo” y “viejo”, “falso” y “justo”, “inteligente” y “tonto”. Esto podría tener que ver con forzar a la gente a tomar partido.
Los adjetivos adversos se utilizan para asustar, propagar mentiras y azuzar las peores emociones. Por ejemplo, en la siguiente entrada habla de cómo EE. UU. está siendo invadido por criminales y personas con enfermedades mentales para incitar los sentimientos antiinmigración de sus votantes.
Es un gran honor para mí representar al Partido Republicano como su candidato presidencial. Nuestro Partido está UNIDO y FUERTE, y comprende plenamente que nos enfrentamos al peor, más incompetente, corrupto y destructivo presidente de la historia de los Estados Unidos. Millones de personas están invadiendo nuestro país, muchas de ellas procedentes de cárceles e instituciones psiquiátricas de otros países. Las altas tasas de interés y la inflación están asfixiando a nuestra gran clase media, y TODOS, nuestra economía es mala y nuestro mercado de valores está subiendo solo porque las encuestas indican firmemente que GANAREMOS las elecciones presidenciales de 2024. Ahora estamos, bajo el corrupto Joe Biden, una nación del Tercer Mundo, que utiliza el Sistema de Injusticia para perseguir a su oponente político, ¡A MÍ! Pero no teman, no fallaremos, recuperaremos nuestro otrora gran país, pondremos a ESTADOS UNIDOS PRIMERO y HAREMOS A ESTADOS UNIDOS GRANDE OTRA VEZ, MAYOR QUE NUNCA. ¡El 5 de noviembre pasará a la historia como el día más importante de la historia de nuestro país! DIOS BENDIGA AMERICA.
- Estilo informal. Trump adora las mayúsculas, equivalentes en la etiqueta de internet al lenguaje agresivo que, a veces, se acompaña de signos de exclamación. En algunos mensajes, casi todas palabras empiezan con mayúsculas:
En otros, todas las palabras están directamente en mayúsculas:
El uso de signos de exclamación es una característica notable que transmite énfasis e informalidad. Por ejemplo, otro estudio indica que Trump utiliza con frecuencia signos de exclamación junto con adjetivos negativos como “¡triste!” o “¡patético!” Su uso de mayúsculas, como “HAZ A ESTADOS UNIDOS GRANDE OTRA VEZ”, subraya su habilidad para crear sueños.
- Actitudes denigrantes contra las mujeres. El siguiente mensaje hace referencia al apoyo que recibió Hilary Clinton de Alicia Machado, exmiss Universo de Venezuela, durante la campaña de 2016. Frecuentemente, estos mensajes aluden a la vida sexual o falta de moralidad de las mujeres.
Adjetivos degradantes, como “falsa”, “fraudulenta”, “poco ética” o “inútil”, se utilizan para describir a quienes rivalizan con él, muchas veces mujeres.
Otro estudio sobre los mensajes de sus tuits apunta a que su retórica a menudo contiene ideología opuesta a la corrección política. El lenguaje despectivo de Donald Trump hacia las mujeres ha sido un aspecto importante de su personalidad pública. A pesar de esto, Trump lo ha mantenido.
El atractivo de este aspecto de su lenguaje se puede explicar por las percepciones que hay sobre un supuesto privilegio de género del que disfrutan las mujeres y sobre unos logros del feminismo que resultan excesivos para algunas personas.
El informe de la organización HOPE reveló que la mitad de los hombres jóvenes encuestados creen que el feminismo “ha ido demasiado lejos y obstaculiza el éxito de los hombres”.
Simple, provocador e informal
Resumiendo, el lenguaje de Trump se ha caracterizado por la simplicidad, provocación e informalidad, que a veces cae en el mensaje hiperbólico. Su estrategia de comunicación ha sido descrita como única en la política mundial. Su retórica se ha destacado por su negatividad y por estar dirigida contra grupos específicos, empleando estrategias como la manipulación, la difamación y la polarización.
Como se recordará, Trump fue expulsado de Twitter (ahora X) en 2021, debido al “riesgo de una mayor incitación a la violencia” tras el asalto al Capitolio de los Estados Unidos. La decisión de Twitter se basó en una revisión que determinó que sus tuits violaban su política contra la glorificación de la violencia. Esta acción marcó un paso significativo para Twitter, que anteriormente había permitido a Trump un margen de maniobra considerable debido al interés público de sus intervenciones, incluso cuando dichos discursos infringían las reglas de la plataforma. En cuanto Elon Musk se hizo con Twitter, permitió a Trump volver, pero este ha preferido comunicarse desde Truth Social.
Miren Gutiérrez, Investigadora, activismo de datos, Universidad de Deusto
Este artículo fue publicado originalmente en The Conversation. Lea el original.